22 | 11 | 2019

Año tras año crece el consumo en las ofertas de Black Friday y Cyber Monday, para que lo barato no salga caro, os ofrecemos 10 consejos para comprar estos días sin problemas:

  1. Comprar lo que se necesita: son días en los que todos los estímulos que recibimos nos animan a comprar, es por eso, que es necesario tener claro que necesitamos y hacer un consumo responsable tratando de no adquirir nuevos modelos si los antiguos funcionan, reutilizando lo que tenemos en casa, comprando localmente y no endeudándonos consumiendo lo que no podemos asumir económicamente. Para este último punto, es necesario ir con cuidado con los créditos y las tarjetas de crédito, teniendo claro en todo momento cuánto hemos gastado, en el que y que tenemos dinero cuando toque pagar por ello.
  2. Comparar: Es importante si elegimos una oferta compararla con otras ofertas, con la de otros proveedores, de otros productos u de otras marcas, con el fin de adquirir lo que necesitamos con la mejor relación calidad-precio posible. Especialmente, estos días concretos, hay que vigilar los precios originales de los productos en los que se aplica el descuento o rebaja en los días anteriores para asegurar que realmente la oferta es una oferta, ya que, hay una práctica común con la que las empresas suben sus precios unos días o semanas antes del Black Friday y Cyber Monday, para que tengamos la sensación de que el precio que ofrecen es muy bajo y que la reducción es muy grande, pero apenas hay ningún cambio significativo.
  3. Vigilar el precio: los precios deben indicar el precio reducido y el precio original y/o la reducción porcentual en el primero. Debemos comprobar que esta oferta de precios es real y está bien indicada, sino podemos reclamarla. Sin embargo, el precio debe ser total y por lo tanto debemos ver que los gastos de envío y los impuestos están incluidos, no vale que nos lo cobren más tarde por separado y el precio final se altere.
  4. Supervisar si hay alguna condición especial: Por lo general, cuando hay ofertas hay condiciones especiales, pero estas deben estar bien indicadas. Las principales con los que debemos tener cuidado son las políticas de devolución que pueden ser marcar diferencias en los plazos, las excepciones o el método de devolución del dinero. Por lo tanto, si vemos que hay condiciones especiales no debemos comprar lo que es probable que se devuelva y si lo devolvemos porque hemos visto que no había condiciones especiales, pero nos las imponen, podemos reclamar que no estaba indicado.
  5. Conservar la publicidad: como hemos hablado en el artículo de las ofertas y promociones, la publicidad es vinculante y, por lo tanto, la empresa debe cumplir con lo que contiene. En el momento de reclamar será importante que tengamos a nuestro alcance todo lo que se ha ofrecido y nos haya incitado a comprar, además del billete o factura. 
  6. Analizar las garantías: la garantía es la misma que los otros días, más concretamente dos años y es el vendedor quien tiene que garantizarnosla, si no también podríamos reclamarla. Hay que recordar que no es lo mismo la garantía que el desistimiento, ya que en este último podemos devolver los productos sin que presenten daños o defectos de fábrica. El período de desistimiento solo está disponible en las compras fuera del sitio o a distancia (Internet) y es de 14 días. Sin embargo, los establecimientos físicos suelen dar unos días para hacer reembolsos si un producto no nos convence, pero como hemos explicado suelen aplicar condiciones especiales cuando hay ofertas.
  7. Comprobar calidad: no se pueden aplicar descuentos o reducciones porque el producto tenga taras o defectos, debe tener la misma calidad que el producto cuando no se oferta. Es importante que lo miremos, ya que está prohibida la reducción en el precio por falta de calidad.
  8. Dudar del vendedor: Al comprar en Internet es necesario averiguar quién está detrás de los sitios web porque, gracias a Internet hay estafas ocultas en las tiendas en línea. Por eso, lo primero que tenemos que ver es si la Web es lógica, si hay faltas de ortografía o si se nota que se trata de una traducción mal hecha. También podemos buscar si hay otras opiniones en el sitio web de otros consumidores o fuera de alguien que ha utilizado la web. También, tenemos que ver si hay suficiente información sobre los productos y condiciones de compra, pero, sobre todo, es necesario ver si se identifica a la empresa para saber si los datos ofrecidos son reales y si tiene una ubicación física. Debemos ser cautelosos si empezamos a ver cosas que no nos convencen no debemos comprar en lugares sospechosos, también debemos tener en cuenta que si la empresa se encuentra fuera del territorio de la Unión Europea será muy difícil o improbable que si hay algún problema obtengamos una respuesta a cualquier reclamación y/o reclamación.
  9. Desconfiar de las ofertas imposibles: cuando una oferta es tan buena que no podemos creerla, no debemos creerla, porque normalmente habrá algo que no será como lo prometido en el anuncio, no llegará el producto, no será de la calidad prometida, tendrá defectos, se cobrará por enviarlo o la empresa vendedora se ocultará cuando reclame.
  10. Reclamar: Si, por mucho cuidado que hayamos tenido, finalmente hemos tenido problemas en la compra, contratación, aplicación de la oferta, obtención del producto adquirido, aplicación de la garantía, derecho de desistimiento o cualquier otro que tenga que ver con las relaciones de consumo en el Black Friday o Cyber Monday, pediremos a la empresa vendedora interponer una reclamación y si en un mes no nos responde o dentro de este plazo no llegamos a un acuerdo, podemos acudir a los servicios públicos de consumo o a nuestra asociación para que gestionen la reclamación e intenten llegar a un acuerdo. Sin embargo, como hemos visto, tenemos que aportar los tickets y la publicidad para que esta reclamación tenga éxito. Por otro lado, podemos denunciar los hechos con la posibilidad de abrir un procedimiento sancionador en los casos en que se infrinja la normativa vigente.